Tras su último recuerdo del futuro, Lois entra en coma, y en el hospital es secuestrada por Tess y su secuaz Stuart para entrar en su mente y acceder a esos recuerdos que está teniendo. Tess conecta a Lois a una máquina y los recuerdos de la joven empiezan a ser accesibles. Lois recuerda cuando, peleando con Tess, se puso el anillo de la Legión y apareció en el futuro, un futuro donde el sol era rojo y hombres de Zod con plenitud de poderes dominaban una Metropolis donde la camiseta destrozada de El Borrón ondeaba como una bandera.
En ese futuro, la granja Kent se ha convertido en un campo de prisioneros adonde Lois es llevada. Allí se encuentra con Clark, que no tiene poderes, y que le dice que ella ha estado fuera más de un año. Los kandorianos someten a los humanos como animales, todos liderados por Zod. Zod tiene en sus filas a Tess, que está convencida de que Zod era la salvación de la humanidad. El general le quita a Lois el anillo de la Legión, y decide ejecutar a Lois y a Clark. Cuando Clark está a punto de morir bajo la espada de Zod, aparece un grupo de resistencia liderado por Chloe y Oliver, que reducen a los kandorianos con flechas de kryptonita. Zod huye, y Tess muere de un flechazo en brazos de Ollie.
Los recuerdos continúan ahora en la cabeza de Clark, que se conecta a Lois al intentar sacarla de la máquina. Chloe explica a Lois que las torres solares transforman el sol en un sol rojo, y los satélites de LuthorCorps filtran esa energía y se la devuelven a los kandorianos de forma que les concede sus poderes. Después, Lois y Clark hablan a solas, y Clark le dice que cuando ella desapareció, él se sintió morir, y decidió entrenar por su cuenta para luchar contra Zod, y esa fue la peor decisión que pudo tomar. Los dos se acaban besando y haciendo el amor.
El plan de la resistencia consiste en hackear las torres para volver el sol amarillo de nuevo y que Clark pueda hacer frente a los kandorianos. Chloe inserta el virus, pero en la huída es asesinada por una guerrera de Zod. Ollie también se queda a merced de los kandorianos. Mientras, Clark lucha contra Zod pero aún no ha recuperado sus poderes, y cuando parece perdido, el sol se vuelve amarillo. Zod le recrimina a Clark que podían haber estado unidos, pero que él decidió enfrentársele. Zod le clava a Clark un puñal de kryptonita, y Clark lanza a Zod contra una furgoneta.
Lois corre a los brazos del malherido Clark, que le pone el anillo de la Legión para que vuelva al pasado e impida que ese futuro pueda suceder. Los dos se besan, y al ponerse el anillo, la guerrera de Zod vuelve al pasado con Lois. Ya en el presente, Clark y Chloe sacan a Lois de la máquina, y la chica despertará después sin recordar nada. Clark y ella continúan profundizando en su relación como una pareja que recién empieza.
Después, en la Atalaya, Clark le dice a Oliver y Chloe que no va a enfrentarse a Zod, porque eso es lo que hizo en la visión de Lois y resultó lo peor posible. Dice saber qué tiene que hacer, y entender lo que dijo Jor-El cuando le dijo que salvara a Zod. En un hangar, Zod está dando instrucciones a sus hombres cuando, a sus espaldas, aparece Clark con su uniforme de El Borrón. Zod se gira, orgulloso, y anuncia a sus hombres que “él ha venido”, y les ordena a todos que se arrodillen ante Kal-El. Todos obedecen, y solo Clark y Zod permanecen de pie mirándose.
Un buen episodio de temática futurístico-apocalíptica, cuyo mayor mérito es la gran cohesión que establece entre todo lo visto esta temporada con los flashes de Lois. Me ha gustado mucho la ambientación y la puesta en escena, muy similar al tono que tuvo la saga “Superman y la Legión de Superhéroes” de Johns y Frank, que se desarrollaba también en un futuro en el que el sol era rojo y Superman estaba indefenso. También me ha gustado Callum Blue, que avanza en su registro, y su personaje aparece fuerte, burlón, despiadado, desafiante y visceral.Por lo demás, realmente de este episodio no puedo decir nada más, ni bueno ni malo. Los flashbacks son rápidos e intensos, lo que da un buen ritmo al episodio. La manera en que Clark se pincha con el electrodo de kryptonita me parece un recurso tonto para que él tenga acceso a los recuerdos de Lois, pero bueno. La por muchos esperada escena de sexo entre Lois y Clark, prácticamente ya la habíamos visto en flashes. Y lo demás del episodio… no sé, todo me parece correcto, pero nada me ha fascinado. Ni el plan de resistencia de Chloe y su equipo, ni la lucha entre Zod y Clark, ni nada. Además, hay que tener cuidado con esta clase de líneas temporales en las que se juega con la idea de que hay que evitar en el pasado que suceda algo para que el futuro cambie, porque si el pasado ya ha sucedido en ese futuro, supuestamente es inevitable, ¿no? ¿No era esa, al final, la gran paradoja de la saga madre de todas estas movidas temporales, “Terminator”?
Buen final el de Clark llegando ante Zod, y la aparente tranquilidad y sumisión con la que Zod lo presenta a sus hombres como un nuevo líder. A ver qué da de sí este giro. Pero insisto en que este episodio, tan supuestamente decisivo, me ha parecido carente de toda épica y simplemente correcto, así que no le voy a dar más de un 7.
